
No son artículos; simplemente estos textos forman parte de mí, y si les preguntáis a ellos, también os dirán que yo formo parte de ellos; la separación no es posible, y la recopilación que os presento a continuación trata de resumir diez años de escritos de un tecnólogo, alguien que se dedica al estudio y análisis de la tecnología desde diferentes ángulos y perspectivas, aquél que indaga y va más allá de las obviedades, o simplemente una persona que se ha parado a observar y que le ha dedicado mucho tiempo a entender a la tecnología desde un prisma poliédrico y muy personal.
Sobre el criterio de la selección, prácticamente ninguno, totalmente emocional, he revisado todos los títulos desde el inicio, y aquellos que me han acelerado el ritmo pasaron a una lista finalista de quince, sobre todo aquellos que he referenciado en muchas ocasiones, y que recordaba perfectamente, artículos que no dejaron a nadie indiferente, y de algún modo también he intentado llegar a un punto de atemporalidad en la selección.
Si tuviera que fijarme en métricas vanidosas como el número de likes para hacer este ranking, la llevaba clara.
Sólo dos artículo sobrepasaron la barrera de los 35 likes, Abrí la caja de Pandora, y me encontré a Picasso y ¿Cómo montar un negocio de arte en 8 horas y con 12€? el resto se quedan en un media muy modesta de entre 7 a 10 likes, no escribo para conseguir likes, ni mucho menos, si no para posicionarme como especialista en un determinada temática, y este tipo de contenido no está diseñado para el like rápido, si no para la reflexión lenta.
Aún así no deja de sorprenderme encontrarme en persona con lectores que me dicen que siguen las publicaciones desde hace diez años y nunca se atrevieron a darle un like a ningún artículo. Esta recopilación va por tod@s vosotr@s, y hoy puede ser un gran día para valorar mi trabajo altruista y generoso, asi como las casi mil horas de trabajo a lo largo de estos años. Luego no seas tímid@, aprieta tu dedo contra el ratón, manifiéstate y hazme saber que valoras mi trabajo:
10. Entre «bubbles» e historias del antiguo Egipto… Octubre 2015.

El primero es el que más cuesta y al que le guardo más cariño, el día que empiezas una newsletter comienza un compromiso contigo mismo que no sabes a dónde te va a llevar, la incertidumbre es muy alta, y lo recuerdo como un día de muchos nervios, no se trataba de escribir por escribir, o probar a redactar un artículo, si no articular un estilo, enfocar en una temática, y darle un sentido, en definitiva, romper el hielo, atreverse y superar el miedo de ponerte delante de una hoja en blanco.
Este texto hablaba de los riesgos de vivir en tu burbuja digital personalizada, los peligros de la algoritmia circular que realimenta y refuerza tus propias preferencias, creencias y sesgos en un bucle de realimentación continuo, de no entender la opinión del otro, de aquél que piensa diferente a ti, y sobre todo de no ser consciente de que te está ocurriendo y que te puede afectar a tu criterio, a tus decisiones y a tu manera de ver el mundo.
9. Si nos fusionásemos con la nube, ¿quién ganaría al Trivial? Octubre 2015.

En los primeros años del blog toqué mucho la temática futurista, en una disciplina que disfruto mucho; me siento muy cómodo en ella, y en España, no la valoramos lo suficiente. Por aquél entonces estaba participando activamente en un think tank en Brasil que se llama Envisioning y tuve la oportunidad de conocer a gente muy talentosa, compartir conocimiento y contrastar nuestras visiones del mundo y la tecnología que venía.
Los artículos futuristas apuntaban a predicciones o escenarios de larga distancia a 10, 20, o 30 años, ejercicio que no he dejado de hacer en el blog durante 10 años, pero la diferencia ha sido la ventana de predicción que la he ido bajando a 3 o 4 años, y en el últimos dos años, a seis meses o un año vista.
Existe una razón puramente práctica, y ha sido el emprendimiento de un proyecto tecnológico con IA generativa por el camino, que me ha forzado a centrarme en periodos de predicción más cortos para la toma de decisiones empresariales que os he ido contando de manera transparente a través de los artículos, luego no se trataba de predecir por predecir, si no que os he contado mis decisiones sobre la estrategia tecnológica de mi empresa.
Este artículo proponía un ejercicio de perspectiva sobre qué ocurriría si pudiésemos conectarnos directamente a la «nube» desde nuestro cerebro. En esa fecha todavía no existía Neuralink, la empresa de implantes cerebro-Internet de Elon Musk. Luego propuse los riesgos de desigualdad que podrían llegar a ocurrir. El debate a día de hoy sigue abierto, pero con la actual inteligencia artificial, en la que va a haber dos mundos a dos velocidades diferentes: los que accedan a la IA y los que no.
8. Diversidad biológica vs Revolución tecnológica. Abril 2016.

Os prometo que la imagen de este artículo no la hice con ninguna herramienta de IA de las actuales; las fechas lo confirman. Este escrito explora la relación entre la diversidad biológica y la revolución tecnológica, destacando cómo ambas comparten patrones evolutivos similares. Comenté que la tecnología, al igual que la biología, evoluciona de lo simple a lo complejo, de la generalización a la especialización y de la uniformidad a la diversidad.
Además, se explica el concepto de «technium», que representa un nuevo «reino» de la vida tecnológica, paralelo a los reinos biológicos tradicionales.
7. Cacerolas, postcapitalismo y cuentos de puchero. Mayo 2016.

Quizá sea el artículo más referenciado de todo el blog; lo he citado con mucha frecuencia. En alguna ocasión me he venido arriba y he hablado de economía en el blog; no me hagáis ni caso, porque no tengo ni idea de economía, simplemente es mi hobby.
Que duda cabe que perfectamente podía haber sido economista; la preferencia siempre estuvo ahí, pero simplemente la nota de corte me dio para comenzar una ingeniería técnica en telecomunicaciones, que era mi primera opción, en lugar de estudiar económicas, que era la segunda. Desde entonces, en mis ratos de ocio intento aprender de economía.
El capitalismo tradicional se ha basado en la premisa de producir más en el menor tiempo posible, reduciendo costes marginales y aumentando márgenes de beneficio. Sin embargo, la tecnología actual junto con los efectos de red ha llevado este modelo al límite, permitiendo una producción más eficiente y económica, lo que está provocando una mutación en el paradigma productivo y competitivo.
Existen dos errores fundamentales en la sociedad. El primero es pensar que estás viviendo en un sistema capitalista, cuando se trata de un sistema con reglas plutonistas, y el segundo, confundir el capitalismo (trabajo, ahorro e inversión) con el consumismo al son del status quo que marca la sociedad. Son dos temas radicalmente diferentes; sin embargo, tanto en la derecha como en la izquierda encontrarás una gran base de votantes que confunden estos términos continuamente.
6. La tragedia de Mozart en la carrera por el talento. Mayo 2016.

Este artículo fue y es mi debilidad, mi favorito, el número uno. El día que lo publiqué provocó un movimiento de liderazgo muy fuerte en la organización en la que trabajaba por aquel entonces. Cuando lo escribí, sabía que nada volvería a ser igual; este artículo me cambió a mí mismo, me hizo abrir los ojos y cambiar la dirección del barco.
Habla de cómo gestionar talento, de las tremendas dificultades que hay para encontrar y fichar talento, y cuando lo tenemos frente a nosotros, no sabemos qué hacer con él, nos supera, se nos escapa de las manos; solo cuando lo perdemos es cuando lo valoramos.
Este artículo lo dediqué a las personas que no encajan y que tienen unas capacidades intelectuales muy altas, personas con talentos que destacan por encima de la media, y que provocan en las demás una incomprensión primitiva.
Tengo una sensibilidad especial para reconocer el talento en otras personas. Desde que publiqué aquel artículo, cuando me lo encuentro, siento la necesidad de resguardarlo con delicadeza, como si fuera cristal de Lalique: una joya de exquisita belleza cuyo valor radica no solo en su forma, sino también en su sutil fragilidad.
5. Si humanizamos a la IA, estaremos perdidos. Abril 2023.

Por estadística, la inteligencia artificial ha sido la temática de la que más he escrito en el blog; sin embargo, el azar ha querido que sólo se incluya un artículo de IA en este ranking, y no un artículo cualquiera, más bien se trata de una tesis, de una observación metódica, de conversaciones con clientes que interactuaban con la inteligencia de mi producto empresarial.
Es una reacción profundamente humana: cuando no comprendemos algo, tendemos a sobrerreaccionar impulsados por nuestros miedos e inseguridades. En la época en que escribí ese artículo, el discurso dominante comenzaba a antropomorfizar la inteligencia artificial, atribuyéndole rasgos humanos como el coeficiente intelectual, sesgos cognitivos y una larga lista de amenazas y peligros que, supuestamente, nos acechaban desde esta nueva tecnología.
El artículo construyó la teoría del espejo como una metáfora para describir la relación entre los humanos y la inteligencia artificial (IA). Según esta teoría, la IA actúa como un reflejo de nuestra propia inteligencia y habilidades humanas. No es ni más lista ni más tonta que nosotros, sino que responde en función de cómo interactuamos con ella.
La información y los datos que los seres humanos hemos volcado en Internet a lo largo de los años se convierten en el espejo en el que la inteligencia artificial se mira. El problema no reside en la IA, sino en nosotros como sociedad.
4. El virtuosismo del solopreneur con el fenómeno Pieter Levels. Junio 2023.

El artículo de Pieter Levels fue el más divertido de escribir, me lo pasé muy bien; es un emprendedor único, superlativo, un humano extraordinariamente inteligente y talentoso. Más allá de las bromas y la anécdota, sólo hay un Pieter Levels y ese es Pieter Levels. Sería un error pensar que todos podemos seguir los pasos de este emprendedor, que es fácil repetir lo que hace, pero no es cierto. De cada 8 billones de personas en el mundo, sólo sale un Levels que nos enseña a los demás que hay otras maneras de hacer las cosas.
3. ¿Crecimiento o rentabilidad? Octubre 2023.

Esta reflexión generó cierto impacto en la comunidad startapera. El mundo de las startups no es, en absoluto, tan brillante como suele retratarse. A menudo, la narrativa dominante lo presenta como un entorno fascinante, repleto de éxitos, multiplicaciones de valor y ventas millonarias. Sin embargo, la realidad es mucho más áspera. El camino de crear una startup es uno de los más duros y exigentes que alguien puede elegir: lleno de sacrificios, desencantos y, en ocasiones, picaresca. Aun así, el relato que lo envuelve tiende a idealizarlo, distorsionando las expectativas de quienes se acercan a él.
El artículo aborda el dilema clásico entre priorizar el crecimiento o la rentabilidad en el ámbito startup. Contrapone dos modelos: los llamados «unicornios», que apuestan por un crecimiento acelerado y masivo, asumiendo grandes pérdidas iniciales, para conseguir algún día la rentabilidad; y los «camellos», que se enfocan en la sostenibilidad de un negocio y la rentabilidad a largo plazo.
Se analiza cómo el capital riesgo ha alimentado burbujas tecnológicas que, en muchos casos, han llevado a startups a fracasar por no alcanzar la rentabilidad. En conclusión, se plantea la necesidad de adoptar una visión más realista y sostenible dentro del ecosistema emprendedor.
2. Nihil Prius Fide – Lecciones de un Emprendedor. Noviembre 2024.

Nihil Prius Fide fue el tercer artículo de una serie dedicada al emprendimiento, que comenzó con el ensayo, siguió con la confirmación, y finalizó con el sello de certificación.
Emprender en el mundo de la tecnología es lanzarse a un océano donde la incertidumbre es la única constante. Superar el primer año es una hazaña; alcanzar el quinto, casi milagroso. En este viaje, he aprendido que las verdaderas lecciones no se encuentran en los éxitos rimbombantes, sino en las tormentas que forjan el carácter y la resiliencia de las personas.
Luego compartí diez lecciones que he aprendido en este periplo emprendedor. No son recetas mágicas ni fórmulas infalibles, sino reflexiones nacidas de la experiencia, con la esperanza de que ayuden e iluminen el camino de quienes, como yo, navegan en las aguas del emprendimiento tecnológico.
1. Dioses, vasallos, y aristócratas. Diciembre 2024.

Y cierro con Dioses, vasallos y aristócratas, un artículo crítico sobre el tipo de sociedad que se está gestando alrededor de los actuales logros tecnológicos, una reflexión que deja abiertas muchas de las preguntas que inevitablemente surgirán en el futuro.
Planteo cómo hemos creado tecnologías con capacidades casi divinas, operadas por individuos con emociones paleolíticas y gestionadas por instituciones de corte medieval. Reflexiono que plataformas como Google, Apple, Facebook, Amazon y Microsoft configuran un tecnofeudalismo moderno, donde los usuarios—convertidos en vasallos—alimentan con su trabajo y datos a los nuevos megamonopolios.
Además, hablé sobre conceptos de “microburguesía low-cost” y “aristocracia artificial”, anticipando una sociedad mediada por la inteligencia artificial, donde incluso las rentas básicas universales podrían redibujar el mapa social. Nos obliga, por tanto, a repensar la relación entre el progreso técnico y nuestras estructuras humanas, aún ancladas en emociones e instituciones del pasado.
Coda Final: Cuando se acaba la partitura… y queda el eco
Diez actos componen esta partitura escrita a lo largo de una década: unos más líricos, otros más disonantes; algunos con tempo allegro y otros en clave menor. Pero todos, sin excepción, nacieron de la misma partitura: la necesidad de comprender (y compartir) el impacto de la tecnología en nuestras vidas.
No he sido un compositor de tendencias, sino más bien un oboísta solitario en la orquesta de la reflexión lenta. He tocado notas que a veces desafinan con el discurso dominante, pero que buscaban resonar con quienes también sienten que el futuro merece ser pensado, no solo programado.
Gracias por estar ahí, escuchando entre líneas, incluso sin aplaudir con un like. Porque aunque esta sinfonía se haya tocado en solitario, nunca ha sonado vacía. Y si después de estos diez artículos te queda una idea zumbando en la cabeza, aunque sea una sola… entonces todo esto habrá merecido la pena.
Si algo he aprendido en este tiempo escribiendo es que la tecnología no se explica sola, y tampoco se resume fácil. Hay que observarla, discutirla, vivirla… y a veces, escribirla. Sobre todo, escribirla.
Este ranking no es un final. Es un punto y seguido. Una pausa para respirar, como cuando el director baja la batuta y se hace un silencio lleno de sentido, luego nos leemos en el próximo artículo dentro de unos meses sobre las 100 lecciones aprendidas en cada una de las partituras.
Nos vemos en el bis ; )